martes, 11 de noviembre de 2008

Filosofia

El Tae Kwon Do y nuestro verdadero ser

Lo más importante para todo aquel que practica Tae Kwon Do es la Lealtad. El Tae Kwon Do puede ser un arma de dos filos. Quien no comprende la verdadera esencia y filosofía de este arte, se convierte en un ser soberbio, prepotente y de mentalidad cerrada. Nuestra disciplina, como toda actividad en la vida, necesita tener raíces y troncos fuertes, bien cuidados. Sin una atención adecuada a las bases, las flores se pudrirán y no habrá frutos. En nuestra filosofía, lo que manejamos es la entrega total, el querer trabajar con honestidad y sinceridad, pero para obtener resultados se necesita practicarla al 100%, de lo contrario, la práctica del Tae Kwon Do, no servirá de nada. En su sentido más práctico, el Tae Kwon Do es un Arte Marcial que sirve para defenderse de posibles agresiones en la calle. Sin embargo, este es un aspecto limitado y en estos tiempos críticos que vivimos, sumamente arriesgado, porque cuando una persona quiere atacarnos, está preparada para ello. Por tal razón este es un aspecto limitado. Pero en su sentido más amplio y más profundo, aquel que podemos aplicar en nuestra vida diaria, el Tae Kwon Do es con la constancia, la disciplina y el respeto a los demás, lo que nos permite alcanzar las metas personales y profesionales que nos proponemos. De esta manera, a través de nuestro Arte Marcial, es posible alcanzar esa actitud de triunfador. Si aplicamos la esencia de la marcialidad a nuestra vida diaria, seremos más felices, y a fin de cuentas todos los seres humanos, sin excepción, estamos buscando la felicidad. En las Artes Marciales la felicidad interna es el objetivo principal, así como lograr el equilibrio entre la mente y el cuerpo. El Tae Kwon Do es un cincuenta por ciento de espíritu y un cincuenta por ciento de físico. Esto está representado en el Um y el Yang, el símbolo oriental del equilibrio, donde la luz es la verdad, el aire es el ambiente, el fuego es el amor y el alimento, la voluntad. En el área de combate, que mide 64 metros cuadrados, los competidores se enfrentan en 3 rounds de 3 minutos cada uno y hay cinco jueces que califican o descalifican y que deciden quien es campeón y quien no. Pero la vida diaria no termina en un round de tres minutos, ni tenemos sólo cinco jueces calificándonos. Tenemos muchos más y sobretodo, uno que es el más difícil de complacer, el de la conciencia; la idea principal es hacer campeones de la vida todos los días.

"Las medallas, los campeones y los torneos son importantes, pero lo es más la necesidad de formar buenos ciudadanos, porque ellos a fin de cuentas, son los verdaderos campeones de la vida. Se ha puesto demasiado énfasis en el aspecto competitivo cuando la esencia de las Artes Marciales es forjar hombres de actitud positiva, agresivos y a la vez con disciplina y respeto. Hombres cuyo campo de batalla sea la vida misma y que salgan por una medalla de oro todos los días".


Beneficios para el practicante del Tae Kwon Do
  • Hasta hace unos cuantos años, el Tae Kwon Do era considerado como un lujo, una disciplina mística a la que pocos tenían acceso. Pero hoy en día es una necesidad que está al alcance de todos.
  • El Tae Kwon Do es una disciplina que no tiene límite de sexo ni edad, porque a cualquier edad se puede practicar tanto por padres, como por hijos y no importa la edad para disfrutar de sus beneficios como son: salud, defensa personal, deporte, arte, encanto.
  • El Tae Kwon Do es el camino del trabajo, de la entrega a un ideal que se consigue a diario en el doyang (escuela) al vestir el dobok (uniforme).